Iván Ibarra, pastor de la Iglesia Manantial de Bendiciones, en contacto con La Mañana de la 100.5, reflexionó sobre la reciente partida del Papa Francisco. A pesar de las diferencias de credos religiosos, Ibarra destacó el legado del pontífice, especialmente su apertura al diálogo interreligioso y su capacidad de tender puentes más allá de las diferencias de fe.

Ibarra manifestó: “Francisco tuvo una actitud de humildad diferente a otros obispados, lo cual se reflejaba en su calzado. Los papas siempre usaban zapatos de color rojo, que significan la memoria de los mártires, y él los usaba de color blanco. Ese fue un mensaje escondido pero profundo, según los entendidos. Los mártires fueron martirizados por la nación romana desde tiempos remotos. Este hombre fue sencillo y humilde en esos detalles”.

“A nosotros, como sudamericanos y argentinos, nos permitió ver sus actitudes y sus gestos y sentirnos identificados. Mostró una actitud muy significativa de respeto a los más necesitados y de acercarse más a la gente. Nuestra imagen referencial como liderazgo religioso es la de Jesús, pero que un líder que puede generar una influencia extraordinaria, como cualquier papado, haya mostrado características del líder al que representa es algo muy bueno. Cualquier religioso debe tener esa característica: la del pesar por el que sufre o por el que queda rezagado desde lo social o cultural. Es una fecha triste, porque es la partida de un ser humano al que muchas personas o familias amaron y con el cual se sintieron identificados, pero a su vez es una alegría que un hombre que nos identifica como nación haya mostrado una actitud de fe diferente”, agregó Ibarra.-

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