El intendente Ramón Lanús anunció el fin del impuesto al combustible en San Isidro
El proyecto sobre la eliminación de la tasa municipal aplicada a cada carga de combustible en el distrito de San Isidro, provincia de Buenos Aires, enviado al Concejo Deliberante...
El proyecto sobre la eliminación de la tasa municipal aplicada a cada carga de combustible en el distrito de San Isidro, provincia de Buenos Aires, enviado al Concejo Deliberante por el intendente Ramón Lanús, fue aprobado y a partir de este martes 1 de octubre comienza a regir el fin del impuesto por lo que bajarán los precios en los surtidores del municipio sanisidrense.
Fue un proyecto impulsado por el Lanús, en línea con lo establecido por el Ministerio de Economía de Nación. La iniciativa debía pasar por el Concejo Deliberante, donde finalmente fue votada y aprobada de manera unánime.
Entre los fundamentos de la norma, impulsada por el mandatario y aprobada por los concejales, se destaca el de contribuir al proceso de baja de precios y recuperación de la actividad económica, disminuyendo la carga impositiva, “lo cual representará un incentivo económico para promover el desarrollo local e impulsar una mayor actividad económica en el Partido”.
“Acompañando el esfuerzo que estamos haciendo todos los argentinos para normalizar la economía, decidimos eliminar la tasa municipal a los combustibles. Entendemos que la plata que gasta el Estado es plata que tuvo que pagar alguien que se la ganó trabajando”, sostuvo Lanús. Y agregó: “En San Isidro estamos cuidando el mango, bajando el gasto público y eso nos permite empezar a bajar impuestos”.
“Nos comprometimos a reducir las tasas y estamos cumpliendo. Es el primer paso de un camino que va a ayudar a bajar la presión impositiva del municipio”, cerró el mandatario.
La tasa, formalmente denominada “Tasa por Servicio de Protección Ambiental”, implicaba un costo para los vecinos de $6 sobre cada litro de nafta que cargan. En el caso del GNL, el costo es de $4 por litro. Se trataba de un impuesto que se cobra desde el año 2016.
La medida es posible gracias a que el Municipio de San Isidro viene trabajando fuertemente en la baja del gasto público. A través de la renegociación de servicios y de licitaciones transparentes y competitivas que permiten bajar costos, sólo en cuatro contratos se logró un ahorro de 7.000 millones de pesos.